sábado, 10 de junio de 2023

CRUZAMIENTO DE LAS ÓRDENES MILITARES EN LA CATEDRAL DE CIUDAD REAL.

«Que Dios te despoje del hombre viejo con todos sus actos y que te vista del hombre nuevo que ha sido creado en justicia, en santidad y en verdad en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo». 

El pasado domingo 4 de junio,  a las 17.00 horas, en la Catedral de Ciudad Real, se celebró el cruzamiento y toma de hábito de una veintena de nuevos caballeros de las Órdenes Militares de Santiago, Calatrava, Alcántara y Montesa.
La celebración estuvo presidida por el obispo prior, don Gerardo Melgar Viciosa, con la presencia de don Pedro de Borbón Dos Sicilias y de Orleans, duque de Calabria y presidente del Real Consejo de las Órdenes Militares.
Una vez celebrada la eucaristía, el obispo bendijo las espadas que se utilizaron para el cruzamiento, así como los hábitos de las órdenes con los que serían revestidos. Primero, se cruzaron los caballeros de la Orden de Santiago (que sigue la Regla de San Agustín)  y, a continuación, las órdenes de Alcántara, Calatrava y Montesa (que siguen la Regla Cisterciense).

Don Pedro de Borbón Dos Sicilias, en un momento del acto.

Como dicta la tradición, cada hombre se ha arrodillado ante la espada, «símbolo de la defensa de débiles y oprimidos», y han repetido tres veces el juramento acompañados de sus padrinos, mientras estos les fijaban sendas espuelas doradas a los talones «símbolo de la Caballería». Además, se han despojado de un pañuelo blanco que entregaban al obispo prior, símbolo del «hombre viejo», siendo revestidos por sus padrinos con el hábito y  gorro hexagonal con las veneras, como «hombre nuevo creado en justicia, santidad y verdad».

Las espadas con los que han sido cruzados y las espuelas con las que han sido calzados como nuevos caballeros.

Para finalizar, el obispo Melgar se dirigió a ellos para desearles que «aquello que han prometido que es, en definitiva, luchar por el bien y  para que el mal no impere en este mundo, que sean capaces de llevarlo adelante. Para ello contamos siempre con la ayuda del Señor y de su madre, la Virgen María». Concluyendo la ceremonia con el canto de la salve.


Fuente e imágenes: https://diocesisciudadreal.es/
Publicado por La Mesa de los Notables.